Efectos del «vapeo» en la salud

Tres consejos para aplicar hoy mismo:
 
  1. Aunque el vapeo parece ser una alternativa más segura al tabaco, todavía presenta riesgos significativos para la salud.
  2. Si actualmente usa cigarrillos electrónicos, considere dejar de hacerlo lo antes posible.
  3. Busque apoyo de amigos, familiares o profesionales de la salud si necesita ayuda para dejar de vapear.

Dra. Ariane Lang
Periodista de Mi Bienestar
editorial@mibienestarcr.com

Los cigarrillos electrónicos, también conocidos como vapeadores o vaporizadores, han ganado popularidad en los últimos años como una supuesta alternativa más segura al tabaco. Sin embargo, es importante entender que esto no es cierto. Los cigarrillos electrónicos no son más saludables que el tabaco tradicional.

Esta idea popular surge dado que los niveles de muchas de las sustancias químicas que se inhalan al fumar (y que son peligrosas para el cuerpo) son más altos cuando se quema tabaco en comparación a cuando se vapea.

No obstante, ambos métodos son adictivos y suponen riesgos para la salud, con la diferencia de que dada la “novedad” del vapeo, aún no se sabe con certeza qué tipo de daño a la salud podría causar a largo plazo.

Además, aunque el término «vapor» puede sonar inofensivo, el aerosol que sale de un cigarrillo electrónico no es vapor de agua y puede ser perjudicial para las vías respiratorias.

Por otro lado, uno de los mayores riesgos de los vapeadores resulta de la dificultad de saber exactamente qué productos químicos contienen, ya que la mayoría de los productos no incluyen todas las sustancias dañinas o potencialmente dañinas contenidas en ellos o son etiquetados incorrectamente.

Algunos de los efectos negativos del «vapeo» en la salud incluyen:

  1. Riesgos para la salud de los jóvenes: Los cigarrillos electrónicos, especialmente populares entre los adolescentes, pueden exponer a los jóvenes a la nicotina y otros productos químicos nocivos. La nicotina puede afectar el desarrollo del cerebro y aumentar el riesgo de adicción a otras drogas, mientras que otros productos químicos presentes en los vapeadores pueden tener efectos adversos a largo plazo en la salud.
  2. Impacto en el sistema cardiovascular: La nicotina, presente en muchos cigarrillos electrónicos, es una sustancia tóxica que puede elevar la presión arterial, aumentar el ritmo cardíaco y aumentar el riesgo de sufrir un ataque cardíaco. 
  3. Efectos respiratorios: Aunque el vapor de los cigarrillos electrónicos puede parecer menos perjudicial que el humo del tabaco, puede irritar los pulmones y las vías respiratorias. Asimismo, la inhalación de ciertos productos químicos presentes en los vapeadores puede causar inflamación y daño pulmonar, lo que aumenta el riesgo de problemas respiratorios como asma o lesión pulmonar asociada al uso de cigarrillos electrónicos (o EVALI por sus siglas en inglés: e-cigarette or vaping associated lung injury).
  4. Exposición a productos químicos tóxicos: Los líquidos utilizados en los cigarrillos electrónicos pueden contener una variedad de productos químicos tóxicos, incluidos compuestos orgánicos volátiles, formaldehído y productos químicos saborizantes. Estos ingredientes pueden tener efectos adversos en la salud, como irritación de los ojos, la nariz y la garganta, así como un mayor riesgo de generar daño a órganos, enfermedades pulmonares graves y cáncer.
  5. Riesgos para la salud a largo plazo: Aunque se necesita más investigación, los expertos advierten que el vapeo a largo plazo podría tener consecuencias graves para la salud. Pero debido a la falta de regulación y la falta de estudios a largo plazo, aún no se conocen completamente los riesgos asociados con el uso prolongado de cigarrillos electrónicos.

En resumen, aunque el vapeo puede parecer una alternativa más segura al tabaco, todavía presenta riesgos significativos para la salud y no es una herramienta recomendada por las autoridades para dejar de fumar.

Si está considerando dejar de fumar o vapear, no dude en consultar con un profesional de la salud para obtener apoyo y orientación adecuados.

Fuentes:

Publicado en Mayo, 2024.

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