José David Guevara Muñoz
Periodista de Mi Bienestar
editorial@mibienestarcr.com

 “La gente dice: ‘cómo se va a deprimir un chiquillo’; allí es cuando empieza la depresión y luego esos pacientes llegan a nuestros consultorios cuando tienen quince o veinte años de estar enfermos”, alerta el Dr. Luis Diego Herrera Amighetti, psiquiatra infantil.

Aporta otros dos datos relevantes: en general, el 75% de los problemas de salud mental comienzan antes de que las personas cumplan la mayoría de edad, en tanto que el 50% de esos padecimientos empiezan antes de los 15 años.

“La atención tardía en materia de salud mental es un problema enorme. Postergamos el abordaje temprano de esos problemas, que es cuando deberíamos atenderlos”, advierte.

https://youtu.be/8Ed8oOLW-0g

De acuerdo con el director del Centro de Salud Mental Herrera Amighetti, la falta de educación y los prejuicios en torno a este tema hacen que la gente aplace el tratamiento médico de estos trastornos.

En este sentido, el especialista llama la atención de los padres que tienen niños con severas conductas negativas y desafiantes.

“Son niños explosivos, con baja tolerancia a la frustración. Hay un grupo de ellos que sigue con esas conductas a lo largo de los años y luego resulta que se roban un examen en la escuela o prueban la marihuana con muchachos mayores que ellos”.

Afirma este psiquiatra que la capacidad infantil para tolerar la frustración es muy baja, por lo que a los niños hay que enseñarles desde muy pequeños a ser pacientes, postergar satisfacciones de manera gradual. (Vea video adjunto con otras opiniones del Dr. Herrera Amighetti sobre la prevención).

“Enseñar a los niños a tolerar las frustraciones es una de las intervenciones preventivas más importantes. No hay maduración sin frustración”.

Damos un salto de varios años para hablar ya no de los niños, sino de los adultos y le planteamos la siguiente pregunta al Dr. Herrera Amighetti: ¿Es verdad que los hombres postergamos más que las mujeres las acciones de prevención en materia de salud?

“Eso es cierto. No tanto por razones culturales como por razones biológicas evolutivas. Las mujeres han sido, a través de millones de años, las encargadas de la prole; ellas piensan en términos de guardar alimentos, piensan anticipadamente en cómo proteger a la prole.

“El hombre, en cambio, iba a cazar, se ocupaba de lo inmediato. El hombre es más del momento; la mujer, del futuro”, explica.

Agrega que el hecho de que la mujer tenga un período de embarazo de nueve meses, en el que cada día está consciente de su condición y de lo que va a ocurrir, le permite tener una perspectiva de futuro que los hombres no desarrollan tan fácilmente.