Tres recomendaciones para mejorar su bienestar ¡hoy!

1. Consuma carnes, frutas, vegetales, lácteos, cereales integrales y leguminosas.
2. Evite los productos con exceso de contenido en grasas y azúcares.
3. Absténgase de tomar licor antes de ir a la cama.

José David Guevara Muñoz
Periodista de Mi Bienestar
editorial@mibienestarcr.com

¿Qué papel juega la nutrición en el buen dormir?

Esa fue la primera pregunta que le hicimos a la Dra. Karen Sanabria, del Centro de Nutrición Clínica. Su respuesta: «La alimentación es vital para una buena calidad del sueño. Una dieta con restricción calórica puede generarle hambre nocturna a la persona, por lo que se estará despertando. Por el contrario, si la alimentación se basa en grandes cantidades de calorías, principalmente muy cercano a la hora de acostarse, esto generará otro tipo de molestias que también alteran la calidad del sueño». (Lea la nota «El 70% de la prevención está en lo que comemos»).

¿Qué hay que consumir para favorecer el sueño?

Hay elementos que el cuerpo humano no produce y que hay que incorporar por medio de la alimentación; por ejemplo, el triptófano, un aminoácido que es precursor de la hormona del sueño, la melatonina. Eso va a favorecer el tener un sueño reparador.

¿Cuáles alimentos son fuente de triptófano?

Está presente en casi todos lo alimentos: carnes, pavo, pollo, salmón, atún, la yema de los huevos y lácteos. También en frutas como banano, piña, aguacate y ciruela, y en vegetales como espinacas y remolachas. Asimismo, en semillas como las almendras. Lo mismo en cereales, en especial los integrales, y en leguminosas como garbanzos y lentejas.

¿Cuáles alimentos atentan contra el sueño?

Todos los alimentos con exceso de contenido en grasas y azúcares. Los alimentos refinados (modificados para eliminar sustancias como fibra, vitaminas o minerales, lo cual reduce su calidad nutricional) alteran los patrones del sueño. Igual las bebidas alcohólicas. (Lea la nota Cuatro pecados que cometemos en la cocina).

¿Qué tanto agravan al insomnio el sobrepeso y la obesidad?

La falta de sueño puede provocar un aumento en el cortisol, una hormona que se genera principalmente cuando hay mayores niveles de estrés. Esta hormona se ha visto relacionada con el aumento de la grasa abdominal.

El insomnio también aumenta el cansancio en la persona y esto puede generarle ansiedad. Ante esto, puede que la persona no elija bien sus alimentos durante el día; va a buscar opciones más fáciles, preparaciones más rápidas que pueden llevarlo a sobrepeso y obesidad. (Lea la nota 8 consejos para dormir mejor).

¿Cuáles son las principales enfermedades a que se exponen quienes padecen trastornos crónicos del sueño?

Podemos hablar de mala digestión, presión arterial elevada, depresión y obesidad, junto con desórdenes hormonales. También se ve afectado el sistema inmune, lo que da paso a cualquier cantidad de enfermedades, problemas gastrointestinales y migrañas.